Participar activamente dentro y fuera de la política me ha enseñado la necesidad de buscar un trabajo digno, justo y de calidad. Llámese formal, informal, doméstico, o de ámbito agropecuario. Hoy, esa distinción ya no es tan notable.
A pesar que grandes autores como Juan Villoro o Eduardo Galeano han establecido interesantes similitudes entre el deporte de las patadas y nuestra política de la patada y juego sucio