Al menos 8 personas murieron en Estados Unidos a causa de Beryl, un huracán que se degradó a ciclón subtropical este martes. Anteriormente, Beryl ocasionó otras diez víctimas a su paso por el Caribe.
En Texas, donde Beryl tocó tierra como huracán categoría 1 la madrugada del lunes, fallecieron al menos siete personas debido a la caída de árboles, un incendio causado por un rayo e inundaciones.
En el condado de Montgomery, cercano a la ciudad de Houston, se reportaron tres decesos la noche del lunes, según autoridades locales. En el área de Houston, una ciudad con 2.3 millones de habitantes cerca de la trayectoria de Beryl, ya se habían registrado otras cuatro muertes.
El ciclón siguió su ruta hacia el noreste de Estados Unidos, causando una muerte más en Benton, Luisiana, según informaron autoridades locales.
Estas ocho víctimas en Estados Unidos se suman a las diez que Beryl dejó en el Caribe: tres en Granada, dos en San Vicente y las Granadinas, tres en Venezuela y dos en Jamaica.
La Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) anunció la entrega de 4.5 millones de dólares en ayuda humanitaria para San Vicente y las Granadinas, Jamaica y Granada.
Altas temperaturas y afectaciones
Entre el lunes y el martes, se cancelaron más de mil 400 vuelos en el Aeropuerto Intercontinental George Bush de Houston, según el portal FlightAware, debido al mal tiempo en la zona.
Este martes, 1.86 millones de usuarios en Texas aún estaban sin electricidad debido a daños en la transmisión eléctrica, según el sitio poweroutage.us. Otros 9 mil 500 clientes en Luisiana también carecían del servicio, según la última actualización.
Mientras los equipos trabajaban para restablecer el servicio eléctrico, varias ciudades instalaron refugios con aire acondicionado ante las altas temperaturas, con sensaciones térmicas de hasta 41ºC, según el Servicio Meteorológico Nacional.
«La mayor preocupación en este momento son los cortes de energía y el calor extremo que está afectando a los texanos», declaró el presidente Joe Biden.
Trayectoria de Beryl
Hace una semana, Beryl alcanzó la categoría de huracán con vientos de 250 km/h que azotaron el Caribe. Posteriormente, se degradó a tormenta tropical el último viernes tras tocar tierra en la Riviera Maya de México, donde causó daños materiales. Sin embargo, retomó fuerza en su trayecto hacia Estados Unidos y tocó tierra nuevamente como huracán el lunes en Matagorda, Texas, con vientos de 130 km/h, causando destrucción e inundaciones en la zona.
Este martes, Beryl se había convertido en un ciclón postropical, avanzando hacia el noreste rumbo a Canadá, con vientos de 45 km/h. Aún podía generar lluvias, inundaciones repentinas y tornados en partes de Misisipi y Ohio, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC).
