El presidente Joe Biden y el exmandatario Donald Trump han dado el visto bueno este miércoles para celebrar dos debates de campaña, uno en junio y otro en septiembre. Sin embargo, aunque ambas partes han acordado las fechas, aún están distantes en detalles cruciales como el lugar y las reglas básicas para los posibles enfrentamientos.
La rápida confirmación de las fechas para los debates sigue al anuncio del demócrata de su negativa a participar en los debates presidenciales de otoño, organizados por la comisión apartidista que ha estado a cargo de estos eventos durante más de tres décadas.
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La propuesta de la campaña de Biden sugiere que el primer debate se lleve a cabo a finales de junio, mientras que el segundo sería en septiembre, antes del inicio de la votación anticipada. En respuesta, Trump expresó su disposición a debatir en las fechas propuestas.
Biden, posteriormente, aceptó una invitación de CNN para un debate el 27 de junio, desafiando a Trump con las palabras: «Te toca a ti, Donald. Como dijiste: en cualquier momento y en cualquier lugar». Por su parte, Trump confirmó su participación afirmando que «estará allí».
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A pesar de estos avances, aún hay desacuerdos significativos en cuanto a la organización de los debates, incluyendo los medios asociados, moderadores, ubicación y reglas. La propuesta de Biden, por ejemplo, excluye a candidatos de terceros partidos, como Robert F. Kennedy Jr., planteando un desafío adicional en la planificación de los eventos.
