Gracias a los nuevos deportes incluidos en el programa olímpico.
A cuatro años de distancia, la expectativa de una medalla dorada es real para el país, que enfrentará los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028 con renovada esperanza tras su desempeño en París 2024. Aunque no se logró el tan ansiado oro, los atletas mexicanos mostraron su talento y determinación al obtener cinco medallas: tres de plata y dos de bronce, mejorando los resultados de Tokio 2020.
La adición de seis nuevas disciplinas olímpicas, como flag football, béisbol, softbol, lacrosse, cricket y squash, ofrece nuevas oportunidades para el deporte mexicano. Entre ellas, el flag football destaca por el entusiasmo generado, luego de que las selecciones femenil y varonil ganaran medallas de plata en el campeonato continental de 2023 y aseguraran su participación en los Mundiales de 2024.
Diana Flores, una figura clave en el flag football mexicano, llegará a Los Ángeles 2028 con la experiencia necesaria y el sueño de conseguir el oro. Además, el béisbol y el softbol femenil también presentan grandes posibilidades de éxito para México, basadas en sus recientes logros internacionales.
Aunque deportes como el lacrosse, cricket y squash no son tan populares en México, cuentan con federaciones y atletas comprometidos que intentarán poner en alto el nombre del país en los próximos Juegos Olímpicos.
En resumen, Los Ángeles 2028 representa una oportunidad para que México compense la falta de un oro olímpico y afiance el crecimiento de deportes emergentes que podrían llevar al país a un lugar destacado en el medallero.
