Descubre el innovador pebetero de los Juegos de París: una llama olímpica sin fuego

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Los Juegos Olímpicos de París no solo han marcado un hito con su ceremonia de apertura, sino también con un pebetero que desafía la tradición al prescindir de la llama olímpica convencional.

Este elemento emblemático no solo es un símbolo de la competencia, sino también una muestra de vanguardia con una estructura inspirada en el primer globo aerostático.

¿Cómo opera el pebetero de los Juegos de París?

El pebetero de los Juegos de París 2024 se alza a 30 metros de altura y presenta un anillo luminoso de 7 metros de diámetro que, a diferencia de lo habitual, no utiliza combustibles fósiles. En lugar de una llama real, este pebetero está alimentado completamente por energía eléctrica.

Ubicado en el Jardín de las Tullerías, una de las zonas más emblemáticas de la ciudad, el pebetero puede ser admirado desde el suelo todos los días entre las 11 de la mañana y las 7 de la noche. Durante la noche, la estructura se eleva a 60 metros sobre el suelo y permanece iluminada hasta las 2 de la madrugada. Esta elevación permite que el pebetero se convierta en un punto focal en las fotos, con vistas al Museo del Louvre, la famosa Pirámide del Louvre, el obelisco de la Plaza de La Concordia y los Campos Elíseos con el Arco del Triunfo de fondo.

El diseño del pebetero rememora el histórico primer vuelo de globo aerostático realizado en París en 1783, haciendo un guiño al pasado y simbolizando el avance tecnológico.

Un pebetero 100% eléctrico

Una de las características más destacadas del pebetero de los Juegos de París 2024 es que, en lugar de una llama de fuego, utiliza un sofisticado sistema de iluminación eléctrica, marcando una nueva era en la presentación del símbolo olímpico.

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