Hoy la República necesita que las y los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación se conduzcan de manera extraordinaria. Está en estas personas la salvación de la democracia
En fin, mucho se podría seguir abundado sobre el despropósito que significa esa propuesta, pero quiero abordar ahora algunos otros aspectos de la reforma al Poder Judicial de los que se ha hablado menos, pero que también devienen inapropiados.
No necesitamos una bola mágica para ver lo que sucederá, ya lo vimos en Bolivia -único país que elige a sus principales cortes en elecciones populares-, donde a partir de esta reforma de 2011, Evo Morales pudo dominar al Poder Judicial a su antojo.
En estos días, el gobierno ha evidenciado su intención de utilizar esa trampa para que el parlamento termine teniendo muchos más diputados y senadores oficialistas, que los que de por sí ya le dieron las urnas.