En una visita previa a las negociaciones internacionales sobre el clima, el Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, ha viajado a la Antártida, un lugar de importancia global donde el hielo milenario se está derritiendo debido al calentamiento global causado por la actividad humana. Guterres busca enviar un mensaje urgente de que es necesario actuar de inmediato para abordar esta crisis.
Guterres afirmó que lo que ocurre en la Antártida no se queda allí. Además de reflejar una gran cantidad de luz solar fuera de la Tierra, este continente juega un papel crucial en la regulación del clima global al impulsar las corrientes oceánicas principales. El derretimiento del hielo antártico provoca el aumento del nivel del mar y altera la salinidad y los hábitats de los animales marinos.
En la próxima Conferencia de las Partes (COP), las naciones deben fortalecer sus compromisos para abordar el cambio climático. Sin embargo, hasta ahora, estos compromisos no han sido suficientes para frenar el calentamiento global causado por las emisiones de gases de efecto invernadero derivadas de la quema de combustibles fósiles.
Durante su visita oficial de tres días, Guterres estuvo acompañado por el presidente chileno, Gabriel Boric, quienes visitaron la Base Aérea Eduardo Frei de Chile en la Isla King George. Desde un barco, pudieron observar glaciares y aves marinas, incluyendo pingüinos. Guterres describió la COP28 como una oportunidad para que las naciones decidan la eliminación gradual de los combustibles fósiles y se comprometan con proyectos de energía renovable y mejoras en la eficiencia energética.
El Papa Francisco también asistirá a la conferencia climática de la ONU, siendo el primer pontífice en hacerlo. Guterres espera que su presencia transmita a los líderes políticos la imperante necesidad de priorizar la acción climática y de hacer todo lo necesario para cambiar el rumbo en el que nos encontramos hoy.
Por: Patricio Álvarez