El presidente de Hungría y presidente rotatorio de la Unión Europea (UE), Viktor Orban se ha trasladado este lunes a China para entrevistarse con el presidente Xi Jinping. El objeto de la visita sorpresa es continuar su “misión de paz”, de la que se deslinda la UE, después de encontrarse la semana pasada con el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, y con el presidente ruso, Vladimir Putin.
Orban ha declarado que la comunidad internacional debe de “crear las condiciones para un diálogo directo” entre Rusia y Ucrania. Xi Jinping ha añadido que “a todas las partes les interesa buscar una solución política mediante un pronto alto al fuego”, informa la cadena estatal CCTV.
El presidente de China agradeció a su homólogo húngaro sus “esfuerzos para hallar una solución política a la crisis de Ucrania” y agregó que sus países respectivos “comparten las mismas ideas básicas” y que trabajan “en la misma dirección”.
“China ha estado fomentando activamente la paz y promoviendo negociaciones de paz, y alentando y apoyando todos los esfuerzos que conduzcan a una resolución pacífica de la crisis”, indicó Jinping, quien además abogó para que las acciones bélicas “no se expandan a otros lugares” para “evitar un deterioro de la situación”.
El presidente de Hungría subrayó que China “no solo ama la paz ante una turbulenta situación mundial”, sino que “ha presentado una serie de iniciativas constructivas”, presentándose como “fuerza estabilizadora para la paz mundial”, según el mismo medio.
Desde que inició el conflicto entre Ucrania y Rusia, China ha optado por una posición ambigua, declarando respeto para la integridad territorial en alusión a Ucrania y respeto para las “legítimas preocupaciones de seguridad” en referencia a Rusia.
