El presidente Joe Biden se comunicó este sábado con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, para garantizarle su apoyo en la guerra contra Rusia. Esto ocurre en un momento en el que la Cámara de Representantes de EE.UU., controlada por los republicanos, aún no ha aprobado un nuevo paquete de ayuda militar, vital para Ucrania.
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La Casa Blanca enfatizó que la falta de suministros, debido a la inacción del Congreso, obligó al ejército ucraniano a retirarse de Avdivka. Esta retirada, según Washington, ha dado a Rusia «su primer avance importante en meses».
El nuevo paquete de ayuda militar, valorado en 60 MIL millones de dólares, es urgente para Ucrania. Durante la Conferencia de Seguridad en Múnich, el presidente Zelenski se reunió con la vicepresidenta Kamala Harris, quien destacó que «solo hay un plan A para garantizar que Ucrania recibe lo que necesita».
Si no se desbloquea la ayuda de Washington, el grave déficit de munición y otros materiales militares podría afectar aún más el desempeño de Ucrania en el frente. El Senado de EE.UU. aprobó esta semana la nueva partida de fondos, pero el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, se ha opuesto hasta ahora a someterla a voto.
