Dados los muchos temas, acuciantes algunos, a priori se antoja un encuentro ágil y agresivo que ganará no quien tenga mejores argumentos sino quien los trasmita mejor y deje en evidencia al adversario.
Por su contenido erótico, sangriento y violento la cinta de Robert Eggers ha sido catalogada como un filme para adultos y el ingreso es restringido a menores de edad