Está por designarse al representante de Morena
Está por designarse al representante de Morena para la próxima elección presidencial con el resultado de las encuestas y que se dará a conocer por Andrés Manuel López Obrador, todo apunta a que será Claudia Sheinbaum la precandidata.
En la Ciudad de México una nómina a cada momento más amplia se barajó durante meses. Todos los recuentos registraban a García Harfuch, a diferencia de otros nombres que aparecían y desaparecían. Inició entonces un acoso al Secretario de Seguridad de la Ciudad de México por parte de la prensa para que declarara en público su interés por hacerse con la candidatura a la jefatura de gobierno. A cada ocasión, García Harfuch negaba esa aspiración.
Sostuvo que su ambición era servir en el gabinete de Sheinbaum en caso de que fuera la elegida para abanderar a Morena hacia la Presidencia de México en 2024.
Se entiende el interés que despierta el Secretario de Seguridad: eficiente en el combate a la inseguridad, aparente integridad en un cargo que despierta sospechas y recelos, sobreviviente de un atentado que lo elevó a héroe. No menos importante ha sido su discreción como personaje público reacio al protagonismo.
No han faltado tímidas campañas destinadas a desacreditar
Tampoco han faltado tímidas campañas destinadas a desacreditarlo, impulsadas desde dentro de Morena, vinculándolo con el círculo cercano de Genaro García Luna, Secretario de Seguridad del gobierno federal presidido por Felipe Calderón.
Recientemente Omar García Harfuch ha levantado la mano para competir en calidad de precandidato a la jefatura de gobierno de Ciudad de México. A celeridad, ha dado entrevistas a medios de comunicación en que confirmaba su decisión.
La respalda un 50% de apoyo de la población, a significativa distancia de sus perseguidores morenistas, además del reconocimiento popular en el desempeño de su actual cargo. A primera vista sorprende el paso que ha dado en búsqueda de la designación. Todo indica que la determinación es consecuencia de un periodo de reflexión presidido por conversaciones, relaciones y acuerdos con la dirigencia de Morena. En caso contrario, se trataría de un inexplicable suicidio político.
La resolución de García Harfuch se sitúa en un contexto en que Morena ha decidido reconquistar la Ciudad de México a toda costa. Sin duda hay prospectos más morenistas, más izquierdistas, más progresistas, pero ninguno de momento con más expectativas para hacerse con la victoria.
Además, la postulación del propio Harfuch confirma la victoria de Claudia Sheinbaum como candidata de Morena a la presidencia. Para las elecciones de 2024 el voto de la Ciudad de México será decisivo.
El gesto del Secretario de Seguridad se inscribe en estos movimientos. Si Morena quiere ganar la presidencia deberá ganar la capital de la República, para lo que necesita al mejor candidato posible: Omar García Harfuch.
No es un paso espontáneo, tampoco parece obedecer a una ambición completamente personal, se antoja más bien otro servicio, quizás el más importante, a la antigua jefa de gobierno, en unos días candidata a la presidencia de México por Morena.
