Tras cuarenta días de reproducirse incesantemente los hashtags #NarcoPresidenteAMLO y #NarcoCandidataClaudia, su origen se asocia con una campaña negra impulsada por cercanos al equipo de Xóchitl Gálvez. El llamado de Jorge G. Castañeda hace once días a iniciar campañas sucias contra la candidata de Sigamos haciendo Historia había sido atendido desde treinta días antes.
La campaña se desató preferentemente en X (antes Twitter), acaparando el protagonismo. Los seguidores de Fuerza y corazón por México impulsaron los hashtags a lo que contribuyeron simpatizantes (o cuentas robotizadas) de otros países. La campaña de descrédito no se dirige únicamente a AMLO o a Claudia Sheinbaum, sino también a Morena. Las redes sociales activas que vinculan el hashtag son X e Instagram, sin presencia en Facebook y TikTok.
En X, involucró al 50% de los usuarios de la plataforma de México, mientras que en Instagram alcanza el 46%. La campaña no se limita a las redes, sino que se extiende a periodistas, comunicadores e informadores contrarios a Morena que extienden el mensaje opositor. La elección de los hashtags no ha sido azar, sino que remiten de inmediato a dos inquietudes de los ciudadanos relacionadas con la seguridad y la corrupción. No es casualidad que ambas constituyan la directriz de las denuncias de Xóchitl Gálvez hacia su adversaria: la política del Presidente de la República de “abrazos y no balazos”. Los hashtag despiertan emociones de ira y tristeza que invitan a la desafección de Morena, o al menos eso es lo que están tratando de hacer. Una campaña, guardadas proporciones de miedo fundada en “un peligro para México” de viejo cuño y ampliamente conocida, no sé si hoy, efectiva.
La campaña en redes prioriza los mensajes negativos con un 71% frente a los positivos con un 21%. Esta proporción es normal, puesto que el voto depende de factores vinculados con las emociones y lo negativo afecta directamente a lo emocional. Los equipos de campaña buscan impactar en las emociones del ciudadano condicionando su respuesta de manera favorable a sus intereses. El equipo de Xóchitl emplea una estrategia dirigida a que los usuarios de las redes, o bien afirmen su voto hacia Xóchitl, o bien cambien de opción para decantarse también por Xóchitl.
Te recomendamos: Editorial. Violencia en el proceso electoral
La realidad es que «responder» si es que las comunidades de Morena quisieran hacerlo, a veces puede darle al otro una entidad que no logra por sí mismo. Es importante expandir la propia palabra antes que entrar en un diálogo que no construye nada. Especialmente en X, que es una plataforma de gente ya convencida y posicionada. No hay votos a conquistar en esa plataforma, solo posicionamientos previos que habilitan únicamente su ratificación. En Morena hicieron bien en no engancharse con las respuestas directas.
Te puede interesar: Editorial. Desatinos de los políticos
Las campañas negras polarizan cada vez más subrayando la negatividad de las candidatas y el candidato. Los hashtags #NarcoPresidenteAMLO y #NarcoCandidataClaudia son los más destacables hasta el momento. Pero previsiblemente se multiplicarán a medida que avance el proceso electoral.
