La organización feminista Elementa DDHH ha advertido sobre las posibles repercusiones de la reforma impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, que busca prohibir el uso del fentanilo en México. Según la organización, esta medida podría aumentar la violencia del crimen organizado y la corrupción sin afectar significativamente al mercado o a las redes de macrocriminalidad.
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La reforma propuesta busca modificar los artículos 4, 5 y 19 de la Constitución, argumentando protección para la salud de las personas. Sin embargo, Elementa DDHH considera que estas modificaciones «recrudecen el enfoque punitivo», vulneran los derechos humanos y van en contra de estándares internacionales en políticas de drogas.
Entre las reformas incluidas en el paquete del mandatario mexicano el pasado 5 de febrero se encuentran medidas contra la producción y distribución ilegal de drogas sintéticas como el fentanilo, así como la aplicación de prisión preventiva contra extorsionadores y narcotraficantes. Elementa DDHH argumenta que elevar la prohibición a nivel constitucional podría generar más redes de corrupción y violencia por parte de grupos del crimen organizado.
#COMUNICADO?|| Desde Elementa rechazamos la adopción de estrategias basadas en la mano dura contra las drogas que ponen en riesgo la salud, la vida y la libertad de las personas.
— Elementa DDHH (@ELEMENTADDHH) February 12, 2024
Las iniciativas presentadas por @lopezobrador_ ?? sobre política de drogas ponen en riesgo los DDHH pic.twitter.com/5foj0QFcOk
La organización también advierte que estas reformas podrían incrementar la población penitenciaria sin sentencia por delitos menores de drogas, al incorporar el «narcomenudeo» a la lista de delitos que ameritan prisión preventiva oficiosa.
Además, Elementa DDHH señala que esta medida podría obstaculizar el acceso a medidas de reducción de daños para usuarios de drogas, recrudecer el hostigamiento policial hacia ellos y propiciar detenciones arbitrarias y tratos crueles.
La organización rechaza la estrategia como electoral y basada en «la mano dura contra las drogas», poniendo en riesgo la salud, la vida y la libertad de las personas.
Es importante destacar que esta iniciativa de López Obrador se presenta en un contexto de creciente presión por el tráfico de fentanilo, coincidiendo con las elecciones presidenciales de México en junio y de Estados Unidos en noviembre.