En el marco del Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada, organizaciones civiles y colectivos indígenas llevaron a cabo la marcha ‘Ruta hasta encontrarles’ en Chiapas, donde el aumento de desapariciones refleja la escalada de la violencia relacionada con el narcotráfico.
Las agrupaciones exigieron al gobierno mexicano reconocer oficialmente la gravedad de la crisis de desapariciones y cesar la estigmatización hacia quienes demandan atención sobre este problema. Además, solicitaron campañas de sensibilización para la prevención y denuncia de desapariciones, entre otras medidas. Entre las organizaciones que participaron en la protesta se encuentran el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas, Serapaz, Voces Mesoamericanas, Redias, Melel Xojobal, el colectivo Colembij y el comité Junax ko’tantik. Estas entidades expresaron su profunda preocupación por el incremento de desapariciones en México y Chiapas, donde el control del tráfico de drogas y migrantes está en manos de grupos criminales.
«Nos preocupa enormemente que este fenómeno esté creciendo año con año en el estado de Chiapas. Desde 2018 hasta la fecha, de acuerdo con el registro nacional, que sabemos no refleja la totalidad de los casos, se contabilizan más de mil desapariciones. Hemos visto que este fenómeno se ha triplicado», comentó Mario Ortega, un activista involucrado en la causa.
Los manifestantes señalaron que solo en 2024 se han registrado más de 600 personas desaparecidas en Chiapas, un aumento atribuido principalmente a la «narcoviolencia» que afecta la región de la Sierra Fronteriza.
«Transitar por esa región conlleva un riesgo altísimo. Desafortunadamente, las cifras oficiales están muy por debajo de la realidad porque la gente no confía en las autoridades para denunciar, y el Estado no ofrece garantías para hacerlo», añadió Ortega.
La Red por los Derechos de las Infancias y Adolescencias en Chiapas (REDIAS) subrayó la urgencia de proteger a los menores de edad y sus familias, ante el aumento de desapariciones que podrían estar vinculadas al reclutamiento infantil por parte del crimen organizado.
«Hemos registrado entre 2020 y 2024 aproximadamente 2,300 niñas, niños y adolescentes desaparecidos en Chiapas. Es una situación extremadamente grave, especialmente porque los casos han aumentado cada año», señaló Violeta Galicia, coordinadora operativa de Redias.
Galicia detalló que, solo entre enero y junio de 2024, se reportaron 234 menores desaparecidos en la entidad. Esta alarmante cifra se concentra principalmente en la capital, Tuxtla Gutiérrez, que representa el 25% de todas las desapariciones, seguida de San Cristóbal, Tapachula y Comitán, estos dos últimos ubicados cerca de la frontera sur.
México enfrenta una profunda crisis de personas desaparecidas, con más de 110,000 casos registrados oficialmente y más de 50,000 cuerpos sin identificar en el sistema forense.
Con información de Agencias
