El juzgado de distrito concedió una suspensión inmediata y de oficio a Rafael Caro Quintero, fundador del cártel de Guadalajara, quien está recluido en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 1, Altiplano. Esta medida evita que las autoridades lo extraditen a Estados Unidos.
El capo promovió un nuevo juicio de amparo ante el Juzgado Octavo de Distrito en Materias de Amparo y Juicios Federales en el Estado de México, después de que la semana pasada el gobierno mexicano entregara a Néstor Isidro Pérez Salas, alias «El Nini», jefe de seguridad de los hijos de Joaquín «El Chapo» Guzmán, a las autoridades estadounidenses.
En su demanda, presentada el 27 de mayo, Caro Quintero argumentó que se han violado sus derechos constitucionales, tal como están plasmados en los artículos 1, 14, 16, 17, 22 y 119 de la Constitución Política mexicana. Por ello, el titular del Juzgado Octavo, José Fernando García Quiroz, le otorgó la medida cautelar para proteger sus derechos fundamentales.
“Se decreta de plano la suspensión para el efecto de cesar todo acto prohibido por el artículo 22 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y 15 de la Ley de Amparo; y para el efecto de que la parte quejosa quede a disposición de este Juzgado Federal respecto a su libertad personal, en el lugar en que se encuentra recluido y para que se abstengan de ejecutar contra el quejoso la petición de extradición, que dice, existe en su contra”, indica el resolutivo del juzgador, publicado este jueves en estrados judiciales.
El juez ha programado la audiencia constitucional para el 26 de junio, donde decidirá si le concede el amparo definitivo.
Caro Quintero es solicitado por Estados Unidos
Caro Quintero es solicitado por Washington para ser juzgado por el asesinato de Enrique Camarena, un agente de la agencia antidrogas de Estados Unidos, ocurrido en febrero de 1985 en Guadalajara, Jalisco.
El narcotraficante fue fundador del cártel de Guadalajara junto con Miguel Ángel Félix Gallardo y Ernesto Fonseca Carrillo, con quienes empezó a operar en los años 70. En 1985, fue detenido en San José de Costa Rica y posteriormente extraditado a México. En 1989, fue condenado a 40 años de prisión por los delitos de privación ilegal de la libertad en su modalidad de secuestro, homicidio calificado, siembra, cultivo, cosecha, transporte y tráfico de marihuana, suministro de cocaína y asociación delictuosa.
No obstante, después de cumplir 28 años de cárcel, en agosto de 2013 un tribunal de Guadalajara ordenó su liberación inmediata, argumentando que el homicidio del agente estadounidense debió ser juzgado en el fuero común y no en el federal. El 15 de julio de 2022, Caro Quintero fue detenido nuevamente en Guachochi, Sinaloa.
