Este lunes 8 de abril marca el segundo aniversario desde la desaparición y trágico hallazgo del cuerpo de Debanhi Susana Escobar Bazaldúa en Escobedo, Nuevo León.
Mario Escobar Salazar, padre de la joven estudiante de derecho de la Universidad Autónoma de Nuevo León, lamentó la falta de avances en el caso: «Es decepcionante que, tras dos años, no haya ningún detenido. El caso permanece abierto debido a la corrupción arraigada en este asunto».
Hace dos años, Nuevo León fue sacudido por la desaparición de Debanhi Escobar, de 18 años, cuyo cuerpo fue encontrado sin vida 13 días después, dejando aún sin resolver el caso por parte de las autoridades.
«Es decepcionante que, tras dos años, no haya ningún detenido. Si después de dos años no hay arrestos y el caso sigue sin resolver, es evidente que hay corrupción detrás de esto», reiteró Mario Escobar Salazar, quien actualmente se postula para una diputación federal por el Distrito Dos, bajo el partido Movimiento Ciudadano.
Luego de su postulación, Escobar Salazar presentó propuestas centradas en la protección de las mujeres y la lucha contra la impunidad en casos de violencia de género.
«Estamos en contra de la impunidad y ofrecemos un apoyo total a las mujeres. Queremos demostrar que estamos comprometidos a trabajar para prevenir más feminicidios, para que no haya otra Debanhi«, dijo el residente de Apodaca.
Debanhi fue vista por última vez la noche del 8 de abril de 2022, cuando asistió a una fiesta con varias amigas en Escobedo. Trece días después, su cuerpo fue encontrado en una cisterna en el motel Nueva Castilla, donde se había realizado una inspección previa.
Inicialmente, las autoridades estatales determinaron que su muerte fue accidental al caer en la cisterna. Sin embargo, una segunda autopsia reveló que murió por asfixia, llevando la investigación a manos de la Fiscalía General de la República.
La familia de Debanhi sigue esperando justicia, mientras continúan recabando pruebas para acelerar el proceso legal.
Desde entonces, Debanhi Susana Escobar Bazaldúa ha sido revictimizada, encontrando su tumba vandalizada en el municipio de Galeana.
