La Fiscalía General de la República (FGR) de México ha completado la entrega en extradición al gobierno de los Estados Unidos de Francisco Pulido Coracero, señalado por el Departamento de Justicia estadounidense como un suministrador clave de químicos para la producción de drogas sintéticas por el cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y otras organizaciones delictivas.
Según información proporcionada por el Departamento de Justicia de EE. UU., Pulido Coracero y su co-conspirador, Carlos Algredo Vázquez, estuvieron vinculados durante una década en actividades relacionadas con la fabricación y distribución de drogas sintéticas. Ambos individuos también se implicaron en el tráfico y distribución de productos químicos esenciales para la producción de metanfetaminas, como la metilamina, el nitroetano, el ácido fenilacético, el tolueno y la acetona.
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La acusación contra Pulido Coracero fue presentada en febrero de 2021, y se espera que comparezca ante la Corte Federal de Distrito para el Distrito de Columbia el próximo martes. La FGR solicitó la orden de detención con fines de extradición al juez de Distrito del Centro de Justicia Penal Federal en la Ciudad de México, cumplimentada en octubre del año pasado en Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco.
La entrega de Pulido Coracero a las autoridades estadounidenses se realizó en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de Tijuana, Baja California, para su traslado a Washington.
El martes próximo, Pulido Coracero, de 66 años, comparecerá ante el juez Moxila A. Upadhyaya en el Distrito de Columbia, luego de que en 2021 un gran jurado en Washington lo acusara junto con Carlos Algredo Vázquez, de 58 años, por conspirar para fabricar y distribuir metanfetaminas, así como conspirar y distribuir productos químicos para su elaboración.
El Departamento de Justicia de EE. UU. informó que en julio de 2023 el hermano de Carlos Algredo Vázquez, Javier Algredo Vázquez, de 56 años, fue condenado a 18 años y ocho meses de prisión por cargos relacionados.
El fiscal general Merrick B. Guirnalda comentó: «Los productos químicos precursores son el alma de la mortal operación de tráfico de drogas del cártel de Jalisco». Agradeció la colaboración del gobierno mexicano en la extradición y afirmó que el Departamento de Justicia no escatimará esfuerzos para responsabilizar a quienes contribuyen al tráfico de drogas y a la devastación de comunidades con sustancias mortales.
Según documentos judiciales y pruebas presentadas en el juicio de Javier Algredo Vázquez, los implicados utilizaron empresas aparentemente legítimas en México y Estados Unidos para adquirir productos químicos que luego fueron distribuidos y utilizados por el CJNG y otras organizaciones mexicanas de tráfico de drogas para fabricar sustancias controladas, importadas posteriormente a Estados Unidos desde empresas en China, India y otros lugares.
