En la conferencia matutina en Palacio Nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró este jueves la negativa de que sus hijos hayan comercializado material de relleno para la construcción del Tren Maya.
Incluso, señaló que debido a esta afirmación, intentaron responsabilizarlos del incidente ocurrido en marzo pasado, en el que un vagón descarriló.
«Si mis hijos están involucrados en un negocio ilegal, deben ser sancionados como cualquier otro ciudadano. Lo digo aquí, desde que asumí el cargo», declaró.
«Presentar una denuncia contra mis hijos por la venta de material de relleno para el Tren Maya, prácticamente culpándolos del descarrilamiento del tren debido a la baja calidad del material que vendieron. Eso es una gran mentira, eso es típico de los malhechores», afirmó.
La candidata presidencial Xóchitl Gálvez presentó el 25 de marzo pasado una denuncia contra familiares del presidente de México, incluidos dos de sus hijos, por posibles actos de corrupción en el proyecto del Tren Maya.
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La candidata de la coalición Fuerza y Corazón por México señaló que hay irregularidades que han llevado a un aumento en el costo del proyecto, pasando de una estimación de 120 mil millones de pesos a más de 500 mil millones de pesos.
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Contrastó que el presidente mexicano, sus funcionarios, familiares y allegados han convertido este proyecto para conectar el sureste de México en «un gran acto de corrupción».
La denuncia presentada por Gálvez involucra a los hijos del presidente de México Andrés Manuel y Gonzalo López Beltrán; sus sobrinos Pedro y Osterlen Salazar Beltrán, así como al amigo de estos Amílcar Olán.
