Quinientos elementos de la Guardia Nacional arribaron al puerto de Acapulco el pasado martes por la tarde, con el objetivo de reforzar la seguridad en medio de una creciente ola de violencia que ha afectado a la región.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) indicó que la llegada de estos agentes federales busca «inhibir los índices delictivos mediante acciones conjuntas que permitan contribuir en la preservación del orden y la paz pública». El personal castrense se desplegará realizando tareas de disuasión, prevención, patrullajes, reconocimientos y estableciendo puestos militares de seguridad para generar un ambiente de tranquilidad en la población.
El convoy de la Guardia Nacional realizó un recorrido en las colonias Emiliano Zapata y Ciudad Renacimiento, zonas de Acapulco que han registrado diversos hechos de violencia en las últimas semanas.
La situación de seguridad en Acapulco ha empeorado recientemente, lo que llevó al Gobierno federal a anunciar un refuerzo en la estrategia de seguridad en la región. «La intención es fortalecer a los efectivos y el despliegue en esa plaza, sobre todo en las colonias donde está habiendo este tipo de ilícitos», afirmó el general Ricardo Trevilla, jefe del Estado Mayor Conjunto, durante la conferencia matutina.
Con esta acción, se espera que la presencia de los 500 elementos de la Guardia Nacional contribuya significativamente a la reducción de la violencia y al restablecimiento de la paz en Acapulco.
