Emiliano Vázquez Bonilla, alcalde de Zapotitlán de Méndez, negó estar prófugo y aclaró que su ausencia se debió a problemas de salud. Vázquez Bonilla se defendió en su perfil de Facebook, respondiendo a las acusaciones relacionadas con los hechos violentos ocurridos el pasado 31 de mayo y 1 de junio, que resultaron en la muerte de una persona y lesiones a dos civiles vinculados a la campaña del presidente electo del Partido del Trabajo (PT), Ramón Malagón García.
En su mensaje publicado el jueves 13 de mayo a las 20 horas, Vázquez Bonilla agradeció a Dios, amigos y familiares por su apoyo. Admitió haber confrontado al chofer del candidato del PT y a otros dos individuos, a quienes calificó de extorsionadores. Según el alcalde, estas personas intentaron ingresar al territorio para realizar cobros ilegales.
Desmintiendo las versiones de que estaba escondido, Vázquez Bonilla afirmó que nunca huiría de su destino y que su equipo en el ayuntamiento seguía trabajando por la ciudadanía. Además, acusó a los fallecidos y heridos de haberlo agredido primero. En su publicación, mostró fotos de ellos y los describió como delincuentes, afirmando que uno de ellos incluso le apuntó con una pistola en la cabeza, pero él logró desarmarlo.
Relató que los tres sujetos cobraban cuotas a comerciantes locales y que el primer ataque ocurrió el viernes por la madrugada, cuando llegaron al crucero por el campo de fútbol, intimidando a la población. Según Vázquez Bonilla, acudió al lugar para impedir su entrada y negó dispararles en estado de ebriedad.
El alcalde defendió su gestión, asegurando que había eliminado los robos y asaltos en el municipio y que no permitiría que delincuentes extorsionen a los comerciantes. Concluyó su mensaje reiterando que no se estaba escondiendo y que siempre enfrentaría su destino con la frente en alto.
