La Secretaría de Salud de México ha lanzado una alerta ante el incremento de casos de sarampión detectados en el país, algunos de los cuales se han originado por importación.
Hasta la semana 13 del año 2024, se han reportado un total de 859 casos probables de sarampión o rubéola en territorio mexicano. De estos, cuatro han sido confirmados como casos de sarampión, con uno de ellos identificado como importado y los otros tres posiblemente relacionados con casos importados.
El sarampión es una enfermedad viral altamente contagiosa que puede tener consecuencias graves, especialmente en niños pequeños y personas con sistemas inmunológicos debilitados. La mejor forma de prevenir su propagación es a través de la vacunación.
¿Quiénes deben vacunarse por el nuevo brote en México?
Las autoridades sanitarias recomiendan que todas las personas, especialmente los niños, reciban la vacuna contra el sarampión. Esto incluye:
- Niños: La vacuna contra el sarampión se administra típicamente en dos dosis, la primera alrededor de los 12-15 meses de edad y la segunda entre los 4 y 6 años de edad. Estas dos dosis son cruciales para garantizar una protección completa contra la enfermedad.
- Adultos jóvenes y adultos: Aquellos que no recibieron la vacuna durante la infancia o no completaron las dos dosis deben considerar ponerse al día con la vacunación. Esto es especialmente importante para aquellos que viajan a áreas donde el sarampión es más común o para aquellos que trabajan en entornos donde pueden estar expuestos al virus.
- Profesionales de la salud: Los trabajadores de la salud tienen un riesgo aumentado de estar expuestos al sarampión y de transmitirlo a pacientes vulnerables. Por lo tanto, es crucial que estén completamente vacunados contra la enfermedad para proteger tanto a sí mismos como a quienes atienden.
- Personas con sistemas inmunológicos debilitados: Aquellos que tienen sistemas inmunológicos comprometidos, ya sea debido a condiciones médicas o tratamientos como la quimioterapia, pueden tener un mayor riesgo de complicaciones si contraen el sarampión. La vacunación en estas poblaciones puede ayudar a prevenir enfermedades graves.
En resumen, la vacunación contra el sarampión es una medida crucial para proteger la salud individual y comunitaria. Al asegurarse de que todos estén vacunados, podemos reducir la propagación del virus y prevenir brotes de esta enfermedad altamente contagiosa