Este miércoles, las inmediaciones del Congreso de la Nación de Argentina fue escenario de vehementes choques entre manifestantes y fuerzas policiales mientras el Senado discutía la Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, vital para el Gobierno del presidente Javier Milei.
Desde temprano, diversos colectivos, incluidos miembros de agrupaciones políticas y sindicales, se congregaron en el centro de Buenos Aires para manifestar su rechazo a la «ley ómnibus», que propone profundas reformas al Estado y la desregulación de varias normativas. Algunos manifestantes se concentraron desde la noche anterior frente al recinto, bajo fuerte custodia policial.
La tensión se incrementó con el transcurso de las horas. Más personas se sumaron a las inmediaciones del Congreso, ocupando calles adyacentes. Alrededor de las 4 pm (hora local), la situación alcanzó un punto crítico. Los manifestantes lanzaron piedras, palos y botellas a la policía, que respondió con gases lacrimógenos y camiones hidrantes. Las detonaciones resonaban en la zona, marcando el punto álgido de los enfrentamientos.
🇦🇷🚨#ÚLTIMAHORA | Mientras el Parlamento Argentino debate un paquete reformas impulsadas por el gobierno; manifestantes incendian un coche frente al congreso de Buenos Aires. pic.twitter.com/qZ6m4DaeD1
— La Torre News (@latorrenews_mx) June 12, 2024
Aunque no hay informes oficiales sobre heridos, periodistas presentes observaron a paramédicos asistiendo a varias personas.
En que consiste el paquete legislativo
El paquete legislativo en debate, que ya cuenta con media sanción de la Cámara de Diputados, incluye medidas significativas como la declaración de «emergencia pública en materia administrativa, económica, financiera y energética por un año». Esta declaración otorgaría facultades al Poder Ejecutivo para legislar en estas áreas sin pasar por el Congreso, lo que ha generado controversia y oposición.
La Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos es crucial para la administración de Milei, que busca implementar reformas estructurales profundas. Sin embargo, ha encontrado una fuerte resistencia de opositores políticos, sindicatos y diversos grupos sociales que temen sus implicaciones.