Residentes de diversas localidades en California despertaron con advertencias de evacuación debido a la intensa tormenta que azota el estado, prevista para dejar la mayor cantidad de lluvia hoy, aumentando significativamente el peligro de inundaciones, deslizamientos y cortes de energía en toda la región.
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) de Los Ángeles anunció el domingo que se mantiene una vigilancia de inundaciones para todas las áreas de la región metropolitana.
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En el condado de Ventura y Santa Bárbara, al norte de Los Ángeles, residentes se vieron obligados a abandonar sus hogares ante la alerta de nivel 4, el más alto, que indica «alto riesgo» por lluvias abundantes.
El NWS advirtió sobre posibles récords «históricos» de lluvia acumulada, y las áreas afectadas por incendios del año pasado se mantienen en alerta de evacuación por el riesgo de deslizamientos. Desde la frontera con México hasta el norte de la Bahía de San Francisco, las ciudades costeras están alerta ante las órdenes de emergencia.
«Dadas las grandes cantidades de lluvia esperadas en el período, las tasas de lluvia de 3 a 6 horas podrían ser problemáticas, provocando flujo de lodo y escombros, así como desbordamientos rápidos de ríos y arroyos locales», señaló el NWS.
En la Bahía de San Francisco, se informaron apagones que llevaron al cierre de la sala de emergencias de un hospital, mientras que el NWS emitió una advertencia de vientos con «fuerza de huracán» para esa región.
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Avisos de fuertes vientos, alcanzando hasta 100 km/h, también están en vigor para casi 30 millones de personas en áreas interiores en todo el estado. Las estribaciones y montañas, anticipando récords de nieve este domingo, podrían experimentar ráfagas de viento de aproximadamente 150 km/h.
