El presidente electo de Guatemala, Bernardo Arévalo de León, afirmó en medio de maniobras destinadas a entorpecer la adecuada realización de su toma de posesión, que será designado líder del país centroamericano en sustitución de Alejandro Giammattei, según lo establecido por la ley.
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El comunicado del presidente electo surgió después de una sesión matinal tumultuosa y accidentada en el Congreso de Guatemala, donde los legisladores salientes aún no han tomado juramento a la nueva administración. La incertidumbre ha ido ganando terreno en el Parlamento, mientras cientos de seguidores de Arévalo se congregaron en los alrededores del Congreso para protestar por estas tácticas dilatorias.
En medio del conflicto, Arévalo de León advirtió que en el Congreso se está «intentando menoscabar la democracia con prácticas ilegales, trivialidades y abusos de poder».
Los diputados tienen la responsabilidad de respetar la voluntad popular expresada en las urnas.
— Bernardo Arévalo (@BArevalodeLeon) January 14, 2024
Se está intentando vulnerar la democracia con ilegalidades, nimiedades y abusos de poder.
El pueblo guatemalteco y la comunidad internacional están observando.
Enfrentamientos, insultos, legisladores encerrados en salones bajo llave y un caos generalizado describen la situación en el Congreso guatemalteco. Los diputados de la nueva legislatura tenían planeado elegir al nuevo presidente del Congreso al mediodía (18:00 GMT), pero cerca de las 15:00 h local, el Congreso saliente ni siquiera había certificado a los 160 nuevos integrantes del Parlamento.
??#ÚLTIMAHORA | Tensión en #Guatemala ante el retraso de la toma de posesión de Bernardo Arévalo como presidente
— La Torre News (@latorrenews_mx) January 14, 2024
Las inmediaciones del recinto legislativo están cercadas por policías.
Aquí todos los detalles
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Esta circunstancia generó temores sobre un posible «cambio de gobierno», como ha sido denunciado por el propio presidente electo, al acusar a la jefa del Ministerio Público, Consuelo Porras, y a «otros individuos corruptos» de obstruir e impedir su investidura.
«Están prolongando la instalación del Congreso en su décima legislatura porque no quieren concederle la investidura a Arévalo», expresó hoy a los medios José Inés Castillo, del partido Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), vinculado a la ex primera dama Sandra Torres, derrotada por Arévalo de León en las elecciones de 2023.
La toma de juramento del nuevo Congreso guatemalteco para el periodo 2024-2028 debe llevarse a cabo como requisito previo a la asunción del presidente electo, Bernardo Arévalo de León, en una ceremonia programada para celebrarse en el Teatro Nacional ante la presencia de una decena de líderes internacionales que asisten a la capital guatemalteca. «Se está gestando un intento de subversión», advirtió Castillo.
Mientras tanto, los dignatarios extranjeros han comenzado a llegar al Teatro Nacional Miguel Ángel Asturias para presenciar la toma de posesión, a pesar de que aún no se ha nombrado al presidente del Parlamento que deberá tomar juramento al nuevo mandatario.
Al evento han sido invitados nueve jefes de Estado, incluyendo al rey de España, Felipe VI, y los presidentes de Chile, Gabriel Boric; Colombia, Gustavo Petro; y Panamá, Laurentino Cortizo, entre otros, además del Alto Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell.
La tensión de esta jornada ha sido la característica predominante de un proceso electoral y de transición marcado por los intentos desde julio pasado del Ministerio Público (Fiscalía) de ilegalizar al partido Movimiento Semilla, principal respaldo del presidente electo, y de impedir que Arévalo de León asuma el cargo este 14 de enero.
