La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha expresado una profunda preocupación ante la posible aparición de un brote de polio en Gaza. La agencia sanitaria de la ONU informó este martes que se ha detectado poliovirus de origen vacunal de tipo 2 (VDPV2, por sus siglas en inglés) en seis muestras ambientales recogidas en la Franja de Gaza. Aunque hasta ahora el virus solo se ha aislado del medio ambiente, la OMS advierte que existe un “alto riesgo de propagación” tanto dentro de Gaza como a nivel internacional si no se toman medidas rápidas y efectivas.
Situación crítica en Gaza
Durante una conferencia virtual desde Gaza, Ayadil Saberkov, jefe de los servicios de emergencia de la OMS en los Territorios Palestinos Ocupados, señaló que la grave situación del saneamiento del agua en la Franja agrava el riesgo de propagación del poliovirus. Saberkov informó que la OMS ya ha comenzado una investigación epidemiológica y una evaluación de riesgos en el terreno para identificar la fuente del poliovirus detectado y determinar las recomendaciones necesarias para prevenir un brote.
Medidas y desafíos
Entre las recomendaciones de la OMS se incluyen la necesidad de una campaña de vacunación masiva, la elección del tipo de vacuna adecuada y la determinación del grupo de población que deberá ser vacunado. No obstante, Saberkov admitió que la implementación de estas medidas será extremadamente difícil debido a la casi paralización total del sistema sanitario en Gaza, la falta de agua y saneamiento, y la dificultad de la población para acceder a los servicios sanitarios.
Preocupación por brotes adicionales
Además del posible brote de polio, Saberkov expresó su preocupación por la posibilidad de otros brotes de enfermedades transmisibles en Gaza. La OMS espera concluir sus trabajos de evaluación durante esta semana y planea trasladar sus recomendaciones también a las autoridades sanitarias de los países vecinos, como Egipto, Jordania e Israel, para prevenir una propagación internacional.
La situación en Gaza requiere una respuesta inmediata y coordinada para evitar una crisis sanitaria mayor, y la OMS continuará monitoreando de cerca el desarrollo de los acontecimientos.