La Organización de las Naciones Unidas (ONU) instó a una investigación a nivel internacional sobre las fosas comunes descubiertas en los principales centros hospitalarios de la Franja de Gaza, denunciando el ambiente de impunidad que prevalece.
El lunes, la Protección Civil de Gaza informó que aproximadamente 200 cuerpos fueron desenterrados desde el sábado de fosas comunes en el hospital Nasser de Jan Yunis, donde fueron enterrados por las fuerzas israelíes.
A principios de abril, la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó que el hospital Al Chifa, el principal en Gaza, había sido reducido a un «cascarón vacío» con numerosos cuerpos.
La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos expresó su consternación por la destrucción de los dos principales hospitales de Gaza.
El Alto Comisionado para los Derechos Humanos, Volker Türk, exigió «investigaciones independientes, eficaces y transparentes» sobre los sucesos. «Dada la impunidad prevaleciente, es imperativo que investigadores internacionales participen en este proceso», afirmó.
Israel alega que Hamás utiliza los hospitales para llevar a cabo ataques y ocultar túneles y armas, acusaciones que el movimiento islamista palestino niega.
Según autoridades de Gaza, se encontraron 283 cuerpos en el hospital Nasser, cifra que el Alto Comisionado de la ONU está tratando de verificar.
Ravina Shamdasani, portavoz del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, declaró a la prensa que «las víctimas fueron sepultadas profundamente en el suelo y cubiertas con desechos», señalando que entre ellos había ancianos y mujeres. Algunos cuerpos fueron hallados «con las manos atadas y desnudos», agregó.