El Ejército de Israel anunció el inicio de incursiones en territorio libanés contra el grupo chií Hezbolá y solicitó el martes a los residentes de varias localidades del sur de Líbano que abandonen sus hogares de inmediato por razones de seguridad.
En un comunicado difundido en la red social X, el portavoz en árabe de las fuerzas armadas israelíes, Avichay Adraee, señaló: «El Ejército no tiene intención de perjudicar a los civiles. Para su seguridad, deben evacuar sus casas de inmediato. Cualquier persona que se encuentre cerca de miembros, instalaciones o equipos de combate de Hezbolá, corre peligro de muerte. Cualquier vivienda utilizada por Hezbolá con fines militares será considerada un objetivo».
Adraee también instó a los civiles a trasladarse al norte del río Awali, en el sur de Líbano, y aseguró que las fuerzas israelíes avisarán cuando sea seguro para ellos regresar a sus hogares.
Un alto oficial del Ejército israelí, en una llamada con periodistas, subrayó que las incursiones son de alcance muy limitado, extendiéndose solo algunos metros más allá de la frontera. El oficial aclaró que Israel no contempla una incursión más profunda en otras áreas del Líbano, como Beirut. El principal objetivo es neutralizar «complejos militares» en zonas cercanas a la frontera que Hezbolá tenía previsto utilizar como base de lanzamiento para atacar la región de Galilea, en una estrategia similar a la empleada por Hamás en el ataque del 7 de octubre del año pasado.
Por otro lado, Hezbolá ha negado que exista una incursión israelí en curso en el sur de Líbano. Un representante del grupo, en declaraciones al canal Al Jazeera, afirmó: «Todas las afirmaciones sionistas de que las fuerzas de ocupación han entrado en territorio libanés son falsas». Además, aseguró que «no ha habido enfrentamientos directos en el terreno» entre las tropas israelíes y Hezbolá.