El ejército iraní ha declarado oficialmente el fin de su operación contra Israel, tras lanzar una serie de ataques con misiles y drones en respuesta al bombardeo del consulado iraní en Damasco. El general Mohamad Hosein Baqerí, jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas iraníes, advirtió a Estados Unidos que cualquier apoyo a una posible respuesta israelí resultará en contrataques más fuertes por parte de Irán.
A través de la embajada suiza en Teherán, que representa los intereses estadounidenses en Irán, se transmitió el mensaje de que cualquier cooperación con Israel en acciones contra Irán pondría en riesgo las bases estadounidenses en la región.
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Baqerí afirmó que el ataque de Irán contra Israel fue una respuesta proporcional al bombardeo del consulado iraní en Damasco, y que el objetivo era la base aérea desde la cual Israel lanzó su ataque. Sin embargo, aseguró que Irán no tiene la intención de continuar la operación.
A pesar de esta declaración de finalización, tanto Baqerí como el comandante en jefe de la Guardia Revolucionaria de Irán, Hosein Salamí, renovaron las advertencias contra Tel Aviv y cualquier país que permita ataques contra suelo iraní. Salamí afirmó que cualquier agresión israelí recibirá una respuesta severa.
El presidente estadounidense Joe Biden condenó los ataques lanzados desde Irán y aseguró que Estados Unidos apoya la defensa de Israel, aunque dejó claro que no participará en operaciones ofensivas contra Irán. Biden convocará a líderes del G7 para coordinar una respuesta diplomática al ataque iraní.
A pesar de no haberse reportado ataques a fuerzas o instalaciones estadounidenses, Biden prometió mantenerse alerta ante cualquier amenaza y tomar todas las medidas necesarias para proteger al pueblo estadounidense.
