El hijo mayor del presidente de Colombia, Gustavo Petro, enfrentará un juicio tras ser acusado por un fiscal de lavado de activos, vinculado a la supuesta entrada de fondos del narcotráfico en la campaña de su padre.
Durante una audiencia en Barranquilla, el fiscal Mario Burgos anunció el llamado a juicio de Nicolás Fernando Petro Burgos, basándose en el testimonio de su exesposa, Daysuris Vásquez. Esta acusación señala que recibió sumas considerables de dinero en efectivo de Samuel Santander Lopesierra, condenado por narcotráfico en Estados Unidos, tras una infidelidad.
El hijo del presidente, capturado en julio pasado, enfrenta cargos por presuntamente adquirir, invertir, ocultar y dar apariencia de legalidad a fondos obtenidos de manera irregular.
La fiscalía afirma que Nicolás Petro recibió alrededor de 400 millones de pesos (unos 102,000 dólares) de Lopesierra y de Alfonso «el turco» Hilsaca, un negociante con antecedentes de financiamiento a grupos paramilitares. Parte de este dinero habría ingresado a la campaña presidencial de 2022, mientras que el resto fue utilizado para un estilo de vida lujoso, según la acusación.
En la audiencia, la defensa de Nicolás Petro solicitó la anulación del proceso, argumentando falta de claridad por parte de la fiscalía. Sin embargo, el juez Hugo Carbonó rechazó la solicitud, destacando la claridad y precisión de los hechos de imputación.
En libertad condicional desde principios de agosto, Nicolás niega que su padre estuviera al tanto de la entrada de estos fondos a la campaña. Mientras tanto, el presidente, aunque no niega las acusaciones, se distancia de su hijo y asegura no ser cómplice de tales crímenes.
Gustavo Petro también está siendo investigado por el Congreso, donde enfrenta la posibilidad de un juicio político y destitución por los mismos hechos. El proceso legislativo se encuentra en una fase preliminar, y el presidente aún no ha emitido comentarios tras la decisión del jueves.
