Un conocido líder de una organización multinacional de yoga tántrico ha sido arrestado en Francia bajo sospecha de explotación sexual. El gurú rumano, identificado como Gregorian Bivolaru, de 71 años, y líder de la Federación de Yoga Atman, fue detenido durante una operación policial en la región de París. La investigación se inició tras informes de manipulación psicológica y explotación sexual dentro de la organización, realizados por antiguos miembros de MISA, como se conoce también a la federación. Bivolaru enfrenta cargos de trata de personas, secuestro organizado, violación y abuso organizado de la debilidad por parte de miembros de una secta.
La operación policial, que involucró a 175 agentes, resultó en 40 arrestos adicionales en diferentes localidades de Francia. Los allanamientos se llevaron a cabo en lugares utilizados por la organización, donde se adoctrinaba y obligaba a las mujeres a participar en actividades sexuales. Estos lugares, conocidos como «ashrams», funcionaban como viviendas para las mujeres seleccionadas por Bivolaru para su iniciación en prácticas de yoga tántrico.
Bivolaru, quien ya había sido condenado por violación a un menor en Rumania, fundó MISA en 1990, la cual posteriormente se expandió internacionalmente como la Federación de Yoga Atman. La investigación francesa reveló evidencia de que los estudiantes eran obligados a participar en actividades sexuales, incluyendo chats de video explícitos con fines monetarios, bajo el pretexto de enseñanzas de yoga tántrico. Estas actividades formaban parte de un sistema de explotación financiera y control.
El caso ha generado un escándalo en el mundo del yoga y ha dejado al descubierto los presuntos abusos cometidos por el líder de esta organización. Las autoridades continúan investigando y se espera que se realicen más arrestos en relación con este caso.
Ataque a fotógrafos en Chilpancingo: Nuevo episodio de violencia contra periodistas en México
En la ciudad de Chilpancingo, cuatro fotógrafos de noticias resultaron heridos en un ataque perpetrado por agresores no identificados. Los periodistas, que trabajan para periódicos locales y sitios de noticias, fueron trasladados a un hospital, aunque no se ha especificado la gravedad de sus heridas. Las autoridades consideran este caso como un intento de asesinato.
Este ataque ocurrió cerca del cuartel local del ejército, cuando los fotógrafos regresaban de cubrir un evento. Es importante destacar que días antes, tres periodistas fueron secuestrados y retenidos en Taxco, también en el estado de Guerrero. Aunque fueron liberados, no se tiene información sobre el motivo de su secuestro.
Guerrero ha sido escenario de violentas disputas entre bandas y cárteles de narcotráfico, lo que ha llevado a una serie de ataques contra periodistas en la región. Estos hechos lamentables demuestran la importancia de condenar la violencia y proteger la labor de los periodistas, quienes juegan un papel fundamental en la denuncia de la corrupción y la violencia en México. Es responsabilidad de las autoridades garantizar la seguridad de los periodistas y llevar a los responsables de estos ataques ante la justicia. Solo a través del compromiso con la libertad de prensa y el respeto a los derechos humanos, podremos construir un México más seguro y justo para todos.
