Julian Assange nació en Townsville, Australia, el 3 de julio de 1971. Estudió matemáticas y física en la Universidad de Melbourne, aunque no se graduó. A los 24 años fue acusado de varios cargos por piratería informática que saldó con una multa de miles de dólares. En 2006 fundó WikiLeaks, una plataforma para difundir información gubernamental que, en opinión de Assange, debía de estar al alcance de los ciudadanos. “Para mantener nuestras fuentes seguras, hemos tenido que distribuir activos, cifrar todo y trasladar telecomunicaciones y personas por todo el mundo para activar leyes protectoras en diferentes jurisdicciones nacionales”, declaraba en 2011 a la BBC.
Para llevar a cabo su cometido, adoptó una vida errante trasladándose de residencia con frecuencia con objeto de proteger WikiLeaks. Pasaba temporadas sin apenas comer, durmiendo pocas horas, siempre concentrado en el trabajo, según testimonio del periodista de New Yorker, Raffi Khatchadourian, quien escribió que “crea esta atmósfera a su alrededor donde las personas cercanas quieren cuidarlo y ayudarlo a seguir con su propósito. Yo diría que eso está relacionado con su carisma”.
WikiLeaks dio a conocer al gran público abusos y violaciones de los derechos humanos en las guerras de Irak y Afganistán por parte de las fuerzas aliadas. Frente a estas revelaciones maniobró la Fiscalía de Estados Unidos negando a Assange la condición de periodista para rebajarlo a mero hacker que exponía la seguridad nacional. De este modo, podría aplicársele la Ley de Espionaje sin perjudicar aparentemente la libertad de prensa.
En el verano de 2010, el australiano se desplazó a Estocolmo para impartir una serie de conferencias a invitación del Partido Socialdemócrata de Suecia siendo portavoz de la formación Anna Ardin que también operaba como jefa de prensa del evento. En casa de Ardin, Assange conoció a la fotógrafa Sofia Welin con quien viajó a la localidad Enköping y en cuya casa se hospedó dos días.
Poco después, ambas jóvenes interpusieron una denuncia por violación y acosos sexual en una comisaría del centro de Estocolmo, aunque las denuncias están rodeadas de sospechas que cuestionan el relato de las denunciantes.
A finales de 2010 se emitió una orden de arresto contra Assange. En junio de 2012, el australiano solicitó asilo en la Embajada de Ecuador en Londres. Las autoridades ecuatorianas le concedieron la nacionalidad. Residió durante años en la residencia diplomática, pero la difícil convivencia deterioró las relaciones entre el cuerpo diplomático y el asilado, a quien finalmente se le retiró la nacionalidad. Además, se involucró en las elecciones de Estados Unidos de 2016 y en el proceso independentista de Cataluña de 2017 que apoyó en todo momento.
En julio de 2016, WikiLeaks difundió 20.000 correos hackeados del partido Demócrata, algunos de los cuales afectaron negativamente a la candidata, Hillary Clinton. En opinión de algunos analistas, la publicación de estos correos facilitó la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de ese año. Se acusó a Assange de colaborar con Rusia en estas filtraciones, algo que siempre ha negado. Como resultado, la embajada ecuatoriana le retiró el acceso a internet y limitó las visitas que recibía.
En mayo de 2017, la fiscalía sueca archivó las denuncias de violación y abusos sexuales. En 2019, la policía de Scotland Yard lo sacó de la sede diplomática con el pretexto de que Julian Assange había violado su libertad condicional. Ingresó de inmediato en Belmarsh, prisión de alta seguridad, situada en el sureste de Londres, en cuyo recinto contrajo matrimonio con Stella Moris, abogada integrante de su equipo de defensa.
En la actualidad, hay demasiadas sombras alrededor de la personalidad del informático. Todavía despierta demasiadas preguntas que no parece que vayan a recibir respuestas pronto.
Hoy Julian Assange, de 52 años, ha conseguido su libertad pero después de haberse declarado culpable de violar la Ley de Espionaje para evitar la extradición a Estados Unidos, transgrediendo la directriz sobre la que se ha fundado su defensa: la libertad de expresión. Es un hombre libre a condición de haber reconocido su derrota tras evadir la extradición a Estados Unidos durante 14 años.
La noche de ayer, un tribunal federal de Estados Unidos en las Islas Marianas del Norte, situadas en el Pacífico, ha aceptado la declaración de culpabilidad por espionaje de acuerdo con el Departamento de Justicia de Estados Unidos y el propio acusado, de manera que la Fiscalía ha retirado la solicitud de extradición y Assange ha viajado a Camberra, Australia.
En 2021, cuando Joe Biden asumió la presidencia de Estados Unidos tuvo la oportunidad de retirar los cargos de la Ley de Espionaje que pesaban sobre Assange de los que le acusó la administración de Donald Trump. El Departamento de Justicia de Barak Obama optó por dejar las denuncias en suspenso dadas las implicaciones que tenían para el ejercicio del periodismo libre. Sin embargo, la Fiscalía de Estados Unidos solicitó la extradición del informático, quien ha pasado los últimos 5 años en la prisión de Belmarsh en Reino Unido.
Parece que el acuerdo de libertad es inseparable de las elecciones a la presidencia de Estados Unidos de noviembre de este año. Joe Biden no deseaba que Assange fuera juzgado en territorio norteamericano puesto que la decisión le hubiera enfrentado al ala progresista del partido demócrata del que es candidato.
