El exlíder republicano y expresidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Kevin McCarthy, confirmó el miércoles 6 de diciembre su decisión de abandonar su puesto en el Congreso a finales de año.
En un video compartido en redes sociales, expresó su agradecimiento a quienes lo han respaldado a lo largo de los años, destacando el amor por su país.
As the son of a firefighter from Bakersfield, my story is the story of America. For me, every moment came with a great deal of devotion and responsibility.
— Kevin McCarthy (@SpeakerMcCarthy) December 6, 2023
Serving you in Congress and as the 55th Speaker of the House has been my greatest honor. pic.twitter.com/jNnYQ8UO4k
La destitución de McCarthy como líder de la Cámara Baja en octubre, impulsada por una resolución de los republicanos radicales y apoyada por demócratas, marcó un hecho histórico al ser la primera vez que prosperó una moción de este tipo.
Aunque en ese momento afirmó que no consideraba renunciar, McCarthy opta ahora por abandonar la Cámara de Representantes al finalizar el año.
En las elecciones legislativas de 2024, McCarthy planeaba buscar la renovación de su escaño como representante del distrito 20 de California, con la intención de fortalecer la mayoría republicana en la Cámara, que obtuvieron en las elecciones de medio mandato de noviembre de 2022.
En una columna para The Wall Street Journal, McCarthy señaló que aunque deja la Cámara de Representantes, no abandona la lucha por servir a Estados Unidos de otras formas.
Comprometido a reclutar nuevos líderes para el Partido Republicano, McCarthy asegura que su contribución continuará apoyando a la próxima generación de líderes.
La salida de McCarthy como presidente de la Cámara Baja en octubre llevó a la presidencia interina a Patrick McHenry, designado por él, y posteriormente, Mike Johnson, aliado de Donald Trump.
McCarthy, de 58 años, ha sido una figura controvertida en su carrera política, enfrentando desafíos internos en su partido y críticas por su gestión y concesiones a los demócratas. Su renuncia marca el fin de una etapa política que abrió oportunidades para nuevos líderes republicanos.