La segunda vuelta de las elecciones legislativas de Francia las ganó el Nuevo Frente Popular (NFP), coalición de partidos de izquierda, en lo relativo al número de escaños pero no de votos. En lo referente a sufragios, en Nuevo Frente Popular NFP no supera el segundo lugar, el primero corresponde a Reagrupamiento Nacional (RN) liderado por Marine Le Pen.
Los datos oficiales del Ministerio del Interior del gobierno francés exhiben que RN se hizo con el mayor número de votos relegando a un segundo lugar a NFP y, al tercero, a Ensamble, el partido del presidente de la República, Emmanuel Macron.
La diferencia entre RN y NFP es de un millón setecientos mil votos en estas elecciones legislativas a la Asamblea Nacional.
Atendiendo al sistema electoral francés, esa diferencia aplastante se tradujo paradójicamente en 88 escaños para RN y 146 para NFP.
Marine Le Pen en sus primeras declaraciones después de los comicios comentó que el resultado no era un fracaso, sino postergación de lo que considera inevitable que es su triunfo y el de su partido en las siguientes elecciones presidenciales.
La estrategia de contención tramada por NFP y Ensamble funcionó a causa de la retirada de 200 candidatos del bloque que impidió que el voto se dispersara y no por el miedo que producía que la derecha pudiera alzarse con la victoria.
El número de votos que RN recibió este domingo ponen a Marine Le Pen a las puertas de una mayoría absoluta que le otorgaría la presidencia de Francia.
