El Gobierno ecuatoriano afirmó haber «agotado las conversaciones diplomáticas con México» en relación al exvicepresidente Glas.
Según declaraciones de la canciller Gabriela Sommerfeld, Ecuador tenía conocimiento sobre la inminente posibilidad de fuga de Jorge Glas del país, lo que motivó el ingreso forzado a la Embajada de México en Quito para arrestarlo y llevarlo a prisión. Sommerfeld enfatizó que su Gobierno había intentado dialogar con las autoridades mexicanas antes de ordenar la intervención policial en la embajada.
La canciller subrayó que «ningún individuo acusado de delitos puede ser considerado perseguido político» y recordó que Glas tenía dos condenas firmes por corrupción. Además, señaló que Glas se encontraba alojado en la Embajada mexicana desde diciembre, mientras enfrentaba una orden de arresto por malversación de fondos públicos.
Te puede interesar: Jorge Glas en Ecuador de la política a polémica
Ecuador solicitó en múltiples ocasiones a la Embajada de México que permitiera el ingreso de la fuerza pública para cumplir con la orden de arresto, petición que fue denegada. Sommerfeld argumentó que la Embajada mexicana contribuyó a que Glas incumpliera con las condiciones impuestas por la justicia ecuatoriana al recibirlo como huésped.
Te puede interesar: México rompe relaciones con Ecuador
El Gobierno ecuatoriano justificó sus acciones en conformidad con la normativa internacional, particularmente en lo que respecta a las convenciones sobre asilo y combate a la corrupción. Además, recordó las declaraciones del presidente de México sobre el asesinato del excandidato presidencial ecuatoriano, Fernando Villavicencio, como un motivo adicional para declarar «persona non grata» a la embajadora de México en Quito y expulsarla del país.
Te recomendamos: Viuda de Fernando Villavicencio de Ecuador rechaza declaraciones de AMLO
Según Sommerfeld, estas declaraciones del presidente mexicano también representaron una violación al principio de no intervención en asuntos internos de otros Estados.
