Este jueves, la administración presidencial cerró filas en torno a Joe Biden después de que la Cámara de Representantes formalizara la investigación de juicio político en su contra.
En respuesta, la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, reiteró que no existen pruebas que respalden las acusaciones planteadas por los republicanos.
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En su conferencia de prensa diaria, Jean-Pierre afirmó: «No hay pruebas de que el presidente haya actuado mal. Nada. Absolutamente ni una sola». El miércoles, la mayoría republicana en la Cámara Baja aprobó formalizar la investigación de juicio político iniciada en septiembre, buscando obtener más información, documentos y testimonios. Jean-Pierre lamentó la situación, describiéndola como una pérdida de tiempo y criticando que los republicanos dediquen esfuerzos a la investigación en lugar de alcanzar un acuerdo sobre un paquete de ayuda, que incluye aproximadamente 61.000 millones para Ucrania y 14.000 para Israel, antes de las vacaciones de Navidad.
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La oposición acusa al presidente demócrata de utilizar sus influencias durante su periodo como vicepresidente en el Gobierno de Barack Obama para favorecer a su hijo Hunter y otros familiares en presuntos negocios irregulares con «enemigos» del país, como China. Hasta el momento, los republicanos no han presentado pruebas que vinculen a Biden con dichas actividades cuestionables.
Es importante destacar que el proceso de ‘impeachment’ no tiene posibilidades de resultar en la destitución de Biden, ya que tal decisión recae en el Senado, donde los demócratas ostentan la mayoría.
