Tras la cumbre de la OTAN celebrada hace unos días en Washington, nada parecía perturbar adhesiones y promesas de ayudas económicas y militares a Ucrania por parte de los países miembros de la Alianza Atlántica. Pero los compromisos se ven amenazados en estos momentos a causa de las declaraciones del candidato republicano, Donald Trump, que en caso de llegar a la Casa Blanca no asegura el apoyo a Ucrania. Por su parte, Alemania ha decidido reducir a la mitad su apoyo militar al gobierno de Kiev en 2025.
El miércoles pasado las autoridades alemanas aprobaron el proyecto de ley de presupuestos. En el proyecto se registra una disminución de 4.000 millones de euros a las ayudas que enviará el gobierno germano a Ucrania, lo que supone una reducción del 46,6% respecto de lo planeado para este año.
Según las cuentas de este año, el gobierno alemán tiene previsto en su presupuesto enviar al gobierno de Zelenski 7.480 millones de euros, casi el doble de lo que Berlín pretende destinar el año próximo.
El Ministerio de Defensa alemán, cuyo titular es el socialdemócrata Boris Pistorius, aspiraba para 2025 a un presupuesto de 58.000 millones de euros, pero se ha limitado a 53.250 millones.
El año que viene el ministro de Defensa verá aumentado en 1.300 millones de euros el presupuesto asignado a su cartera respecto del de 2024, pero lejos de las aspiraciones de Pistorius.
Alemania, según recoge el Instituto para la Economía Mundial (IfK) de Kiel, es el segundo país que más dinero ha comprometido para ayudar a Ucrania en su defensa contra de Rusia. Sólo Estados Unidos contribuye más que Alemania, con 50.400 millones de euros.
