El enfrentamiento entre el equipo argentino Rosario Central y el conjunto uruguayo Peñarol, que tuvo lugar este jueves como parte de la primera jornada del Grupo G de la Copa Libertadores, experimentó altercados previos debido a enfrentamientos intensos entre los seguidores de ambos clubes.
El incidente ocurrió aproximadamente una hora antes del inicio del partido, una vez que los seguidores de Peñarol fueron ubicados en la sección baja de la tribuna Génova del estadio El Gigante de Arroyito.
Los hechos violentos surgieron rápidamente cuando la facción de Peñarol lanzó artefactos explosivos y pirotécnicos hacia los aficionados, mientras que los seguidores de Rosario aprovecharon la falta de presencia policial para tomar tres barreras metálicas de seguridad y arrojarlas hacia la tribuna inferior, sin alcanzar a ningún hincha del club uruguayo.
La policía intervino de inmediato con disparos disuasivos y un contingente de agentes formó un cordón para evitar que los aficionados de Central se acercaran a la sección inferior, logrando restaurar la calma en medio de una atmósfera tensa.
Algunos seguidores de Peñarol que invadieron el campo de juego fueron detenidos por las autoridades. Estos incidentes ocurrieron a pesar de que, horas antes del encuentro, Rosario Central había advertido a sus seguidores sobre las posibles sanciones de la Conmebol en caso de comportamientos inapropiados durante el partido.
Maxi Olvera fue agredido
El jugador del Peñarol de Uruguay, Maxi Olivera, fue agredido por hinchas de Rosario Central de Argentina y sufrió un corte en la cara tras el partido por Libertadores.
Según reportes de los medios de comunicación uruguayos, Olvera fue trasladado de inmediato a un centro hospitalario en Rosario: se planeaba realizarle unos puntos de sutura debido a una lesión en el pómulo.
Rosario Central le ganó 1 – 0 a Peñarol en el Gigante de Arroyito.