En una actuación indiscutible, Scottie Scheffler dominó el Masters con una exhibición magistral de golf en Augusta National. El domingo, avanzó con tiros impresionantes a lo largo de los últimos nueve hoyos, logrando una tarjeta de 68 golpes, cuatro bajo par, lo que le valió su segundo saco verde en tres años.
El imparable Scheffler contó con la colaboración de sus competidores, lo que hizo que su victoria pareciera aún más fluida de lo que fue en realidad.
En 2022, ganó el Masters con un putt de cuatro golpes en el hoyo final, asegurando la victoria por tres golpes. Esta vez, amplió su ventaja a cuatro, lo que le permitió enfrentar con más comodidad el difícil green del hoyo 18.
El sueco Ludvig Aberg, un novato en el Masters, representó uno de los desafíos más difíciles para Scheffler, pero perdió terreno tras un doble bogey en el hoyo 11, donde su bola quedó cerca del agua. Contra un jugador del calibre de Scheffler, esos errores resultaron difíciles de superar.
Aberg concluyó con una ronda de 69 golpes y se ubicó como subcampeón del torneo.
Con tan solo 27 años, Scheffler se convierte en el cuarto jugador más joven en ganar dos chaquetas verdes, consolidando su posición como el número uno del mundo en un nivel que no se veía desde la época dorada de Tiger Woods. Scheffler ha ganado ahora tres de sus últimos cuatro torneos en los campos más exigentes, con un segundo puesto en Houston como el único resultado que no es una victoria.
Por su parte, Woods cerró su participación en el Masters con una tarjeta de 77 golpes, terminando con un total de 304, la mayor cantidad de golpes en 72 hoyos en su carrera profesional.