Tesoros arqueológicos de México deslumbran en el Museo Nacional de Arte de Osaka con la exhibición México antiguo: Maya, Azteca y Teotihuacan
Osaka se sumerge en un viaje fascinante hacia el México ancestral con la exhibición México antiguo: Maya, Azteca y Teotihuacan, que ha deslumbrado al público japonés desde hace una semana en el Museo Nacional de Arte de Osaka. Un tesoro de cerca de 140 piezas invaluables, transporta al visitante a las civilizaciones antiguas, explorando más de tres milenios de historia y esplendor.
Entre las joyas arqueológicas destacan el fascinante ajuar de la Reina Roja de Palenque, los objetos de oro rescatados recientemente en el Proyecto Templo Mayor, y las esculturas de piedra verde provenientes del místico Proyecto Tlalocan, de Teotihuacan. El Museo de Osaka se convierte así en el epicentro de la riqueza cultural de México, gracias a la colaboración de diversas instituciones, incluyendo los museos Nacional de Antropología y Regional de Antropología de Yucatán.
El recorrido visual abarca desde Palenque y Toniná hasta Teotihuacan y Templo Mayor. En la muestra, entre otros objetos, hay un Chac Mool del Museo Regional de Antropología de Yucatán, el Guerrero Águila y una olla Tláloc del Museo del Templo Mayor, así como el enigmático Disco de la Muerte del Museo Nacional de Antropología.
Las esculturas monumentales descubiertas en la Pirámide de la Serpiente Emplumada de Teotihuacan también son protagonistas, sumergiendo al espectador en la grandeza de estas civilizaciones.
La exhibición, concebida por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), no solo busca exponer tesoros arqueológicos, sino también transmitir la complejidad de las culturas maya, azteca y teotihuacana. A través de un análisis detallado de sus cosmologías, manifestaciones artísticas y expresiones universales, la muestra revela la relación de estas civilizaciones con los dioses y la madre naturaleza.
La fecha límite para sumergirse en este viaje único es el 6 de mayo, cuando la exhibición concluye su estancia en Japón. Una oportunidad efímera para que el pueblo japonés y los turistas que estén en la tierra del Sol naciente, se maravillen con la profundidad de las civilizaciones antiguas de México, cuyo esplendor perdura en estas cautivadoras piezas que han cruzado continentes y siglos para iluminar con su historia milenaria.