La Comisión Federal de Electricidad (CFE) ha dado a conocer este miércoles sus planes para la construcción de la primera central solar flotante en Latinoamérica, gracias al respaldo financiero de la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD), mediante un crédito por un total de 161 millones de dólares.
Según el comunicado emitido por la compañía, esta innovadora central, que utilizará superficies de agua para instalar paneles fotovoltaicos, se ubicará en el estado de Sinaloa o en Coahuila, ambos en el norte de México. Actualmente, se encuentran en proceso los estudios de factibilidad para determinar la ubicación final del proyecto.
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La central solar flotante se espera que incremente la capacidad de generación de electricidad renovable en más de 120 megavatios (MW), con un bajo impacto ambiental y social en las áreas designadas para su instalación, de acuerdo con lo expresado por la CFE.
El comunicado también destaca que este proyecto contribuirá a diversificar el parque de generación de la CFE, así como a compensar la reducción de la generación hidroeléctrica durante épocas de sequía y promover el ahorro de agua durante el día.
En cuanto al financiamiento, el préstamo otorgado por la AFD contempla un plazo de 15 años, con dos años de gracia, en condiciones financieras preferenciales. Además, se ha asociado un donativo para cooperación técnica por un monto de 800 mil 620 dólares, destinado a mejorar los procesos de planeación, evaluación e incorporación de centrales renovables en el Sistema Eléctrico Nacional (SEN), con el respaldo de la empresa francesa Red de Transporte de Electricidad (RTE).
Este anuncio se produce en medio de la emergencia temporal declarada por el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) debido a la demanda energética generada por la segunda ola de calor en México, con temperaturas que superan los 40 grados en 22 estados del país.
Es importante señalar que este proyecto se presenta en un contexto en el que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador enfrenta críticas por políticas que favorecen a la CFE y obstaculizan la inversión privada en energía renovable, lo que algunos sectores consideran que ha impactado la generación eléctrica en el país.
CFE y AFD han mantenido una colaboración estrecha durante los últimos 13 años, formalizando diversos contratos de crédito y convenios de cooperación técnica, con un monto acumulado de alrededor de 800 millones de euros, lo que ha permitido el desarrollo de importantes proyectos en el ámbito de la energía renovable y la eficiencia energética.