El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, arremetió contra el gobernador de Guanajuato, Diego Sinhué Rodríguez, así como contra el fiscal estatal, en respuesta a la escalada de violencia en la región. Durante la conferencia matutina en Palacio Nacional, López Obrador enfatizó que el gobernador de Guanajuato «no manda», denunciando la situación de inseguridad en la entidad.
López Obrador expresó que «ya no podemos callar» ni ser «tapadera de nadie», señalando la necesidad de abordar la problemática de seguridad con firmeza. Asimismo, instó nuevamente a la remoción del fiscal estatal, Carlos Zamarripa, subrayando la importancia de que los servidores públicos rindan cuentas y den resultados efectivos.
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Estas declaraciones del presidente mexicano surgieron horas después del asesinato de Bertha Gisela Gaytán, candidata de Morena a la alcaldía de Celaya, Guanajuato. La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana responsabilizó al Organismo Público Local Electoral de Guanajuato por no proporcionar protección adecuada a la candidata.
El homicidio de Gaytán Gutiérrez, ocurrido tras su primer mitin de campaña en Celaya, ha generado una profunda consternación. La Fiscalía General del Estado de Guanajuato ha iniciado una investigación, aunque aún no ha revelado hipótesis sobre el crimen.
Este suceso ha aumentado la tensión política entre Morena y el Partido Acción Nacional (PAN), ya que Guanajuato es un bastión político del PAN. Con las elecciones más grandes de la historia de México programadas para el 2 de junio, este incidente subraya la urgencia de abordar la violencia y garantizar la seguridad en todo el país.
Se espera que más de 97 millones de mexicanos participen en la renovación de 20 mil 375 cargos federales, incluyendo la presidencia, los escaños de la Cámara de Diputados y del Senado, así como nueve gobiernos estatales.
