Las autoridades estadounidenses anunciaron el lunes la detención de 23 personas vinculadas al cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), acusadas de traficar drogas y lavar dinero en su territorio.
Los detenidos enfrentan cargos por presunto tráfico de cocaína, fentanilo, heroína y metanfetamina en áreas de Houston y Galveston, Texas, así como en otras ciudades del país desde diciembre de 2018 hasta abril de 2022, según informó el Departamento de Justicia.
Según el comunicado, «todos operaban bajo el control general del cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG)». Destacando a Roque Zamudio-Mendoza, de 52 años, como líder de uno de los grupos, siendo la principal fuente de drogas introducidas de contrabando a Estados Unidos.
«Se han perdido innumerables vidas estadounidenses a causa de los carteles de Jalisco y Sinaloa, con estos arrestos de docenas de asociados del cártel de Jalisco estamos dando un paso más en nuestra lucha para desmantelar estas organizaciones mortales», expresó el Fiscal General estadounidense Merrick Garland.
«Además de los 23 detenidos, hay otros 18 involucrados con órdenes de captura, de los cuales dos han fallecido y 16 aún no se han localizado, incluido Zamudio-Mendoza», detalló en conferencia el fiscal general estadounidense para el distrito sur de Texas, Alamdar S. Hamdani.
La operación «Rainmaker», que tomó 63 meses e involucró a diferentes agencias estadounidenses, logró desarticular esta red de tráfico de drogas y lavado de dinero.
«El fentanilo constituye una amenaza para la salud y la seguridad públicas», declaró la Fiscal General Adjunta Lisa Monaco, recordando la peligrosidad de esta sustancia sintética, 50 veces más potente que la heroína.
Con información de La Jornada
