El presidente de Francia, Emmanuel Macron, revela planes para presentar en abril una legislación sobre la terminación de la vida con dignidad, aunque con restricciones, y revela su conmovedora reacción ante la carta de Françoise Hardy, la icónica cantante francesa que ha luchado contra el cáncer linfático desde 2004.
En una entrevista conjunta con «La Croix» y «Libération», Macron aclara que la ley que será sometida al Parlamento no implica el suicidio asistido ni la eutanasia directa. Enfatiza que el proyecto estipula criterios estrictos, diferenciándolo de la legislación suiza.
El presidente enumera cuatro condiciones: la edad adulta del individuo, la capacidad de discernimiento claro, la presencia de una enfermedad incurable con pronóstico fatal a corto o medio plazo, y la evaluación del sufrimiento físico y psicológico del paciente.
Macron describe la ley como un acto de fraternidad, permitiendo la elección de lo menos perjudicial cuando la muerte es inminente. Aunque el texto aún debe pasar por el Consejo de Estado para garantizar su conformidad constitucional, se espera que llegue al Consejo de Ministros en abril para una primera lectura en mayo.
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El presidente reconoce que la aprobación del proyecto no será fácil, dada la necesidad de apoyo tanto de la izquierda como de la derecha en la Cámara Baja, donde su partido, Renacimiento, tiene una mayoría relativa. Destaca la emoción que sintió al recibir la carta de Françoise Hardy, quien reclama morir dignamente.
Aunque Francia ya cuenta con una legislación de 2016 que permite a los pacientes en estado terminal dejar de medicarse y recibir cuidados paliativos, los sondeos muestran un amplio apoyo (70%) a una ley que legalice la eutanasia, un término que Macron evita mencionar públicamente.
Jean-Luc Romero-Michel, presidente de honor de la Asociación Francesa en favor del Derecho a Morir Dignamente, celebra el avance del proyecto al Parlamento, pero critica la exclusiva decisión colegiada del equipo médico, algo que no ocurre en otros países con regulación de la eutanasia. Confía en que los parlamentarios puedan modificar el proyecto original para facilitar el acceso.
Con información de Agencias
