El Supermartes o Gran Martes es una fecha decisiva en cualquier elección en Estados Unidos puesto que se asigna un tercio de los delegados en las primarias presidenciales de Republicanos y Demócratas.
Este año el Gran Martes se celebra el 5 de marzo en que se deciden primarias y caucus. No es una votación más, es la votación por antonomasia en que se definen las opciones de los candidatos.
Es el día señalado en el calendario por los ciudadanos para elegir a su representantes de cara a las respectivas convenciones que se celebrarán a mediados de año. Republicanos y Demócratas se reparten las preferencias de los electores. En relación con los republicanos, este martes se disputan 854 delegados de los 2.459; por su parte, los demócratas se juegan 1.420.
En el caso del partido Demócrata, Joe Biden, Presidente de Estados Unidos, se presenta a la reelección. Las sospechas sobre su estado de salud no parecen haber afectado a su candidatura. Todo indica que se hará con un importante número de delegados a pesar de las reservas que ocasiona.
En la actualidad, cuenta con 206 delegados, lejos del número mágico de los 1.968 que consiguió hace cuatro años, cantidad que puede variar después de que New Hampshire violara las reglas al celebrar sus primarias en enero. Se estima que Biden podría alcanzar ese número mágico como pronto en las votaciones del 19 de marzo.
A diferencia de los republicanos, los demócratas asignan sus delegados en todos los estados de manera proporcional, mediante un sistema equitativo que concede delegados a los candidatos menos fuertes. Sin embargo, el principal rival de Biden, Dean Phillips, no ha sabido o no ha podido beneficiarse todavía de esta circunstancia.
No es descartable que en el Gran Martes, Phillips consiga una porción de votos sin preferencia o no comprometidos que le otorguen delegados y que le permitan alcanzar el 15% de los votos. Estos votos sin preferencia son el único obstáculo con que se ha encontrado Biden para que su contrincante siga en la contienda.
Donald Trump, candidato republicano, tiene en esto momentos 122 delegados de los 1.215 que necesita para proclamarse candidato, que habrá de certificarse en la convención republicana. No es menor que haya ganado en todas las votaciones a las que se ha presentado, ganando incluso en contiendas sin haberse presentado. Su fortaleza dentro del bando republicano es indiscutible. Trump podría alzarse con el número mágico como pronto el 12 de marzo.
La adversaria del expresidente es Nikki Haley quien ha recibido el apoyo de una fracción de delegados en cuatro de los seis estados en que ya se han celebrado contiendas. A diferencia de los demócratas, el sistema de elección de los republicanos propicia que el candidato puntero alcance con rapidez un significativo número de delegados.
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Sin rivales de entidad, Biden y Trump encabezarán con seguridad las candidaturas a la presidencia de sus respectivos partidos. Lo más probable es que reediten las lecciones de 2020, en que se impuso el demócrata.
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