El aumento del número de niños y jóvenes que no están en la escuela en el mundo es una noticia alarmante. Esta situación pone en riesgo el futuro de millones de personas y pone en cuestión el cumplimiento de uno de los principales Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU para 2030.
Hay varias causas que explican este aumento. Una de ellas es la “exclusión masiva” de niñas y mujeres de la educación en Afganistán, tras la toma del poder por los talibanes en agosto de 2021. Otra causa es el “continuo estancamiento del progreso de la educación en todo el mundo”.
Este estancamiento se debe a una serie de factores, entre los que se encuentran:
La pobreza: La pobreza es un factor clave que impide que los niños y jóvenes accedan a la educación.
Los conflictos: Los conflictos armados dificultan la prestación de servicios educativos.
Las desigualdades: Las desigualdades de género, étnicas y económicas también obstaculizan el acceso a la educación.
Para revertir esta situación, es necesario que los gobiernos y la comunidad internacional tomen medidas urgentes. Estas medidas deben centrarse en:
Garantizar el acceso a la educación a todos los niños y jóvenes, independientemente de su origen.
Invertir en la educación de las niñas y las mujeres.
Mejorar la calidad de la educación.
La educación es un derecho fundamental que todos los niños y jóvenes deben tener garantizado. Es necesario que todos trabajemos juntos para garantizar que todos los niños y jóvenes tengan la oportunidad de alcanzar su máximo potencial.
A continuación, se presentan algunas medidas concretas que podrían adoptarse para abordar este problema:
Los gobiernos deben aumentar la inversión en educación. Esto incluye la construcción de nuevas escuelas, la contratación de más maestros y el desarrollo de programas educativos de calidad.
Las organizaciones internacionales deben proporcionar apoyo financiero y técnico a los países que lo necesitan.
La sociedad civil debe sensibilizar sobre la importancia de la educación y presionar a los gobiernos para que tomen medidas.
Todos tenemos un papel que jugar para garantizar que todos los niños y jóvenes tengan acceso a una educación de calidad.
Por: Patricio Álvarez
