El gobernador de Texas, Greg Abbott, anunció la expansión de las operaciones de seguridad en la frontera de Estados Unidos con México, intensificando las tensiones con la administración de Joe Biden.
En compañía de trece gobernadores republicanos, Abbott informó a la prensa que la Guardia Nacional de Texas está llevando a cabo acciones para fortalecer las medidas de seguridad en la frontera sur del estado, sin proporcionar detalles específicos.
Joe Biden’s open border policies have had a devastating impact on every community in our nation.
— Gov. Greg Abbott (@GovAbbott) February 5, 2024
Even in the face of Biden's lawsuits, Texas will continue to step up & protect our nation.
America's Governors are behind us.
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La conferencia tuvo lugar en el Parque Shelby, área controlada por la Guardia Nacional de Texas, donde no se permite la entrada de agentes de la Patrulla Fronteriza para procesar migrantes recién llegados.
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Abbott afirmó su derecho constitucional a defender el estado de lo que calificó como «una invasión», refiriéndose a la llegada masiva de inmigrantes sin estatus legal. Abordando a sus homólogos republicanos con tanques de la Guardia Nacional detrás de él, Abbott renovó sus críticas contra la Casa Blanca, acusando a Biden de «abandonar su responsabilidad de hacer cumplir las leyes de Estados Unidos».
“No nos vamos a limitar solo a este parque”, ahondó Abbott que tenía a sus espaldas a sus homólogos republicanos y una fila de tanques de la Guardia Nacional de Texas. El republicano cargó nuevamente contra la Casa Blanca y acusó al presidente Biden de “abandonar su responsabilidad de hacer cumplir las leyes de Estados Unidos”.
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La gobernadora de Arkansas, Sarah Huckabee Sanders, se sumó a las críticas, instando a los gobernadores republicanos a asumir responsabilidades federales. Abbott mantiene disputas legales con el Gobierno Biden por medidas fronterizas, incluyendo alambre de púas y una barrera de boyas en el río Grande.
