La tarde de este martes, se confirmó la liberación de los últimos dos integrantes de la comunidad LeBarón, ubicada en Chihuahua, que permanecían secuestrados. Bryan LeBarón informó a través de un video desde las afueras del Palacio de Gobierno de Chihuahua que las víctimas se encontraban muy golpeadas, pero con vida. Con esto, se completa la liberación de los cuatro integrantes de la comunidad LeBarón que fueron secuestrados.
Te puede interesar: Desaparecen cuatro habitantes de la comunidad LeBarón
Nos comunicaron que ya liberaron a los 2 secuestrados que faltaban. Nos comentan que están muy golpeados, pero ya van por ellos.
— Bryan LeBaron (@BClebaron) January 23, 2024
Muchas gracias a autoridades, a medios y a la sociedad que no nos dejó solos.
Estar unidos hace toda la diferencia. pic.twitter.com/zFBjT9b5V7
Los liberados
Los liberados son Miguel Ángel Moreno Sánchez, Shem Lamar Stubbs Gwin, Manuel Horacio Ríos Jacob y Christian Bruce LeBarón Johnson. El domingo salieron rumbo a la Sierra Tarahumara por el municipio de Madera, pero no llegaron a su destino. La desaparición de los cuatro se reportó el lunes, y ese mismo día fueron liberados Shem Lamar y Christian Bruce, quedando pendiente la liberación de Miguel Ángel y Manuel Horacio.
Las comunidades mormonas binacionales, como la familia LeBarón, Miller, Langford y Johnson, han sido víctimas de la delincuencia organizada que opera en la región de la Sierra Madre Occidental, entre los estados de Sonora y Chihuahua en México, así como en Arizona y Utah en los Estados Unidos.
En los últimos años, estas comunidades han enfrentado el embate de grupos criminales. En noviembre de 2019, el grupo criminal «La Línea» perpetró un atentado armado contra tres camionetas con mujeres y niños de la comunidad LeBarón, resultando en la trágica muerte de nueve personas, incluyendo niños.
Cabe destacar que la familia LeBarón se volvió activista en la Marcha Por La Paz con Justicia y Dignidad en mayo de 2009, después del secuestro de Érick LeBarón en la comunidad mormona de Chihuahua. La situación actual refleja la persistente amenaza que enfrentan estas comunidades por parte de la delincuencia organizada en la región.
