La portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, ha calificado este martes como «extremista» la nueva ley migratoria aprobada por el estado de Texas. La ley, que permite la detención y expulsión de personas migrantes que entren en el estado de forma irregular, ha sido duramente criticada por la administración Biden.
Jean-Pierre ha declarado que la ley «no aportará más seguridad a las comunidades de Texas» y que, por el contrario, «deshumaniza» a los migrantes y «criminaliza» la inmigración. La portavoz ha añadido que la ley «va en contra de los valores de Estados Unidos» y que la administración Biden está «comprometida con la protección de los derechos de todos los migrantes».
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La nueva ley contra migrantes en situación irregular en Texas, impulsada por el gobernador Greg Abbott, ha generado múltiples reacciones negativas. El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, expresó que México siempre estará en contra de estas medidas y las calificó como «politiquería».
También sugirió que Abbott busca la candidatura a la Vicepresidencia de EE. UU. en 2024. El Gobierno estadounidense, a través de la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, manifestó su preocupación y calificó la legislación como «radical» y «deshumanizante».
En el ámbito legal, defensores de los derechos humanos, liderados por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), presentaron una demanda ante una corte federal en Austin. Argumentan que la ley socava la autoridad federal sobre disposiciones migratorias y puede tener consecuencias perjudiciales para las comunidades, especialmente las comunidades de color.
Expertos señalan que la ley podría estar «sujeta a cambios» y que experiencias anteriores, como la ley ‘SB4’ de Arizona en 2010, fueron revertidas por la Suprema Corte. La nueva ley en Texas permite a la policía detener y procesar a personas que no puedan demostrar su situación migratoria, llegando incluso a la deportación sin juicio.
La firma de este paquete legislativo por parte de Abbott, que incluye la ley ‘SB4’, busca posicionarse entre la base conservadora del Partido Republicano en el contexto de las elecciones de 2024.
