Recomendaciones musicales en diferentes formatos a cargo del crítico y promotor Octavio Echávarri
CATÁLOGO
LAMENTABLE PÉRDIDA
TÍTULO: Feels So Good
AUTOR: Chuck Mangione
SELLO: A&M Records
Las malas noticias continúan: el pasado 22 de julio falleció el trompetista Chuck Mangione, que a lo largo de la década de los años 70 fue una celebridad. Su música era una mezcla de pop melódico con jazz suave que reflejaba alegría y optimismo. Sus discos eran éxitos de ventas, pero pocos sabían que su meta original era ser un intérprete de bebop. Su popularidad internacional surgió en 1977 con el disco Feels So Good, el mayor éxito en una dilatada carrera en la que grabó más de 30 álbumes desde los años 60. El reconocimiento del álbum fue impulsado por “Feels So Good”, un tema que se convirtió en un himno del jazz pop; lanzado como sencillo, alcanzó el cuarto puesto en la lista Billboard Hot 100 y se situó en lo más alto del ranking de adulto contemporáneo de la misma publicación. La melodía fue reconocida en 1980 por la publicación Current Biography como “la melodía más reconocida desde ‘Michelle’ de The Beatles”. Respecto a su repentina fama, el músico declaró: “…el éxito de ‘Feels So Good’ permitió que la gente de todo el mundo conociera mi música e hizo posible que me presentara en vivo para un público internacional”. Otros temas destacados son “Maui-Waui” y “Hide and Seek”.

33 RPM
PILAR DE LA MÚSICA MEXICANA
TÍTULO: Lucifer
AUTOR: Lucifer
SELLO: RCA Victor
El recién desaparecido Rodolfo “Popo” Sánchez fue uno de los pilares de la escena jazzística nacional. Una de las características de su trabajo como arreglista y director de orquesta fue que reinterpretó la música tradicional y popular de los estados de México, Oaxaca y Veracruz, estilizando el folclor musical para darle nueva frescura al repertorio de las canciones representativas de esas entidades. En 1974, “Popo” formó el grupo Lucifer con Ramón Flores, Enrique y Jorge Nery, Homero Patrón, Guillermo Espinosa, Miguel Peña, Toño de los Cobos y Mayita Campos. En una época en la que las fusiones entre el jazz, el soul, el rock, la psicodelia y el pop eran muy comunes pero poco efectivas, con su disco homónimo, Lucifer demostró que esas mezclas podían realizarse exitosamente. En este disco de culto nada falta y nada sobra: dos voces, la amplia gama de vientos, los teclados, sintetizadores, clavecines, los violines, las violas y sobre todo, las canciones, significaban un paso gigantesco en la música mexicana. Según el texto en la contraportada del disco, “…tiene el coraje, el empuje, el afán de arte y el corazón de los músicos mexicanos que participaron en su confección con la devoción de cruzados, que pusieron en él su decisión de vencer o morir”.

NOVEDAD
REGRESO AL CAOS
TÍTULO: The Revenge of Alice Cooper
AUTOR: Alice Cooper
SELLO: ear Music
Alice Cooper y su banda original resurgen con fuerza en The Revenge of Alice Cooper, el regreso áspero y cargado de la teatralidad retorcida y el rock afilado que encendió la mecha. El cantante vuelve de una forma que los fans nunca imaginaron ver de nuevo. Por primera vez en más de medio siglo, el grupo original se reúne para un regreso al caos teatral y cargado de riffs que los convirtió en leyendas. El álbum transporta a los oyentes a una época en la que el rock era peligroso, extraño y un poco sangriento; producido por Bob Ezrin, abraza las raíces de la banda con los brazos abiertos y un guillotinazo. Temas como «Black Mamba» y «Wild Ones» tienen la fuerza cruda que evoca los inicios, con su amenaza sonora y su rebelión glamorosa, mientras «See You on the Other Side» se inclina hacia un espacio melódico más inquietante, pero el verdadero susto llega con «What Happened To You», que incluye una guitarra inédita del fallecido Glen Buxton, integrada con una gracia asombrosa; más allá de un homenaje, es una hermosa resurrección. The Revenge of Alice Cooper impacta de forma diferente, es más que un simple álbum de Alice Cooper: es un resurgimiento, un ajuste de cuentas, una carta de amor sonora y mordaz a lo que lo convirtió en uno de los íconos más perdurables del rock.
