Con el fin de avanzar en la construcción del Tren Maya, el gobierno federal ha decretado la expropiación de más de 30 hectáreas distribuidas en municipios de los estados de Yucatán, Chiapas y Campeche. Esta acción responde a una causa de utilidad pública, según se informó en los seis decretos publicados por la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) en la edición vespertina del Diario Oficial de la Federación.
En Yucatán, el primer decreto involucra 0.12 hectáreas del ejido «Techoh», en el municipio de Tixpéhual, por las cuales el gobierno pagó 211 mil 738 pesos. Otro terreno en la misma entidad, perteneciente al ejido «Halachó», en el municipio homónimo, con una extensión de 0.45 hectáreas, fue valuado en 128 mil 401 pesos, según el Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales (Indaabin).
El terreno de mayor extensión corresponde al ejido «Yaxché», en el municipio de Dzitás, también en Yucatán, con una superficie de 30.56 hectáreas, por el cual se pagaron 4 millones 645 mil 387 pesos.
En Campeche, dos terrenos del ejido «Santa Rosa», en el municipio de Tenabo, fueron expropiados. El primero, de 0.67 hectáreas, se adquirió por 456 mil 304 pesos, mientras que el segundo, de 0.06 hectáreas, costó 85 mil 572 pesos.
Finalmente, en Chiapas, el decreto incluyó 1.65 hectáreas del ejido «Estrella de Belén», en el municipio de La Libertad, con un costo de 314 mil 630 pesos.
Estos terrenos forman parte de los esfuerzos del gobierno por acelerar el desarrollo del Tren Maya, uno de los proyectos insignia de la actual administración, que busca detonar el turismo y la conectividad en la región sur del país.
